Estas propuestas educativas están diseñadas específicamente para niños y jóvenes de edades entre los 6 y 17 años, organizados de acuerdo a su nivel y experiencia
La Escuela de Verano del Club Nàutic Portitxol (CNP) se encuentra en pleno funcionamiento al iniciar el mes de agosto. Durante julio, los cursos estivales brindados por el club han alcanzado una ocupación total, atrayendo a un grupo de alrededor de cien niños y adolescentes con edades comprendidas entre los 6 y 17 años, quienes buscan formarse en las disciplinas de vela ligera y piragüismo.
Estas propuestas educativas están diseñadas específicamente para niños y jóvenes de edades entre los 6 y 17 años, organizados de acuerdo a su nivel y experiencia, abarcando dos categorías, iniciación y perfeccionamiento, cada una de ellas con diversos niveles. Las actividades se realizan utilizando embarcaciones colectivas para los alumnos de iniciación o principiantes, en las cuales los monitores brindan instrucción a bordo, mientras que para los alumnos más avanzados se emplean embarcaciones individuales como Optimist, Laser Pico y Vaurien, con seguimiento a través de neumáticas.
Los cursos se llevan a cabo en turnos semanales, con horarios de 9 a 13 horas para piragüismo, además de servicios adicionales de guardería de 8 a 9 y de 13 a 14 horas. En cuanto a vela ligera, las clases se desarrollan de 10 a 14 horas, con servicio de guardería de 8 a 10 horas. Además, el club ofrece opcionalmente un servicio de comedor de 14 a 15 horas.
La Escuela de Verano del CNP es una primera experiencia para muchos de los estudiantes en estas disciplinas náuticas, y para algunos, marca el comienzo de un camino que continúa en la Escuela de Invierno o incluso en el Equipo de Regatas del propio club.
«El verdadero reconocimiento a nuestro esfuerzo en la Escuela de Vela es la pasión y la alegría que experimentan los estudiantes en las actividades náuticas», destaca Rafa Ibancos, director deportivo del CNP. «Es un gran placer acompañar a los jóvenes en sus primeros pasos en este emocionante mundo, y para aquellos que eligen continuar y convertir la vela o el piragüismo en su deporte, participar en su desarrollo deportivo», agrega.
Desde su perspectiva, «la náutica brinda a los niños y jóvenes la oportunidad de conectarse con la naturaleza y consigo mismos, así como de desarrollar la inteligencia visoespacial y la madurez en la toma de decisiones, especialmente en el ámbito competitivo, dado el carácter táctico-estratégico de las regatas», concluye.
Durante el presente mes de agosto, aún hay plazas disponibles en ambas disciplinas. Aquellos interesados en inscribirse en alguno de los turnos semanales que se extienden hasta el 8 de septiembre, pueden reservar su plaza completando el formulario a través de este enlace.