El puerto marbellí apuesta por un consumo responsable y ético con el medio ambiente a través del diseño y venta de productos de moda náutico sostenibles
¿Sabías que la industria de la moda es la segunda más contaminante del planeta? Por ello, en Puerto Banús han lanzado la Concept Store con productos sostenibles y materiales reciclados, para fomentar con ello un consumo más responsable con el planeta y el medio ambiente.
De esta manera, Puerto Banús apuesta por la moda y el diseño sostenible con una línea propia de productos que se pueden adquirir en la boutique ubicada en el Muelle de Ribera y que van desde ropa técnica náutica, hasta productos de gastronomía gourmet, pasando por joyería inspirada en la navegación, complementos, etc.
Toda la gama de ropa Sail Racing Edición Especial Puerto Banús basada en el mundo náutico moderno y la Costa del Sol, que incluyen polos, chaquetas, gorras y mochilas impermeables, están elaboradas con materias primas recicladas bajo el sistema @recover, haciendo que estas piezas limitadas a 50 unidades sean únicas, éticas y sostenibles.
La spin off Recover es una empresa innovadora en el sector de de la moda ya que es una de las máximas empresas textiles especializadas en fabricar algodón reciclado a partir de desechos textiles y con tecnología de desarrollo propio. Es proveedor de muchas marcas importantes a nivel mundial ya que han revolucionado el tejido al mantener una calidad premium en hilos reciclados.
Otros productos exclusivos como las botellas portátiles idóneas para la navegación, están libres de Bisfenol A (BPA) y de otros recipientes tóxicos para el medio ambiente, así como el packaging y las etiquetas de los mismos como ya comentamos en otra publicación, también han sido desarrollados con materiales reciclados y sostenibles y de reducido impacto medioambiental, certificado con el sello FSC que está controlado por Greenpeace y WWF.
Además, Puerto Banús donará cada año un porcentaje del beneficio a una ONG que lucha por la preservación, limpieza y calidad de los océanos. Con ello, pretenden visualizar el firme compromiso con la preservación de los mares, así como de su flora y fauna marina, ya que no hay que olvidar que la industria textil es una de las más contaminantes del mundo y responsable directa del 20% de la contaminación del agua que es causada por el procesamiento textil, lo que lo convierte también en el segundo mayor contaminante de recursos de agua dulce en el planeta. Así mismo, un cuarto de los recursos químicos producidos en el mundo, se usa en los textiles.
Para producir por ejemplo unos simples vaqueros se requieren 7.500 litros de agua, cantidad que equivale al líquido que bebe de media una persona en 7 años. El sector del vestido usa 93.000 millones de metros cúbicos de agua cada año, una cantidad suficiente para que sobrevivan 5 millones de personas. La producción de ropa y calzado produce el 8% de los gases de efecto invernadero y cada segundo se entierra o quema una cantidad de textiles equivalente a un camión de basura.
Por ello, la ropa sostenible del Concept Store Puerto Banús, está hecha con tejidos que provienen de fuentes respetuosas con el medio ambiente, ya sean porque provienen de materiales reciclados o han sido cultivados de manera sostenible.
La realidad lo deja claro: la huella de la moda contamina actualmente más que Alemania, Reino Unido y Francia juntos. El 70% de las emisiones de gas de efecto invernadero de la moda corresponden a la producción, mientras que el otro 30% a la distribución, transporte y vida final de las prendas, la cuales muchas de ellas son quemadas, desprendiendo un 4% del total de gases efecto invernadero que acaban en la atmósfera, siendo por ejemplo en 2018 un total de 2.106 millones de toneladas.
Las emisiones de gases de efecto invernadero de la industria de la moda podrían alcanzar 2.104 millones de toneladas en 2030, lo que duplicaría el máximo fijado en el Acuerdo de París.
Si no se toman medidas, la moda podría llega a emitir hasta 2.700 millones de toneladas de CO2 a la atmósfera. Por eso desde Puerto Banús, apostar por estar tendencia de reducción de gases de efecto invernadero es clave, no solo para su propia boutique y línea de ropa náutica, sino también para hacer extensible al resto de locales comerciales ubicados en el puerto, esta tendencia y compromiso mundial para que la moda y su industria reduzcan en 1.700 millones las toneladas de dióxido de carbono (CO2). El auge atroz del consumismo de ropa barata, es sin duda, la parte más contaminante de la moda.
