Las nuevas instalaciones para fauna y flora marinas favorecen la biodiversidad en la costa del Maresme

Este verano, el Port de Mataró instaló cuatro biòtops en la bocana del puerto con el objetivo de crear hábitats para la fauna y flora marinas. Estos biòtops, que simulan formaciones de escollos naturales, han comenzado a llenarse de vida, convirtiéndose en refugios para los alevines de peces y puntos de crecimiento para la posidònia, una planta marina clave para la biodiversidad de la costa del Maresme.
Además, este otoño se han colocado 25 biohubs, estructuras en forma de jaulas llenas de conchas que proporcionan un espacio seguro para los alevines de peces. Estas iniciativas forman parte del compromiso del Port de Mataró con la sostenibilidad y la protección del medio marino, especialmente ante los retos derivados de la emergencia climática.
El proyecto refleja una apuesta decidida por la conservación del entorno marino, fomentando la regeneración de ecosistemas clave para la fauna y flora autóctona. Con estas medidas, el Port de Mataró reafirma su papel como referente en la promoción de prácticas sostenibles en el ámbito portuario.





