La red homologada de la FVCV actúa como refugio climático con protocolos de seguridad y espacios adaptados ante las olas de calor
Con las olas de calor convirtiéndose en un fenómeno cada vez más frecuente y severo en la Comunitat Valenciana, los refugios climáticos se han convertido en una prioridad para garantizar el bienestar de la población. La Red de Escuelas de Vela Homologadas de la Federació de Vela de la Comunitat Valenciana (FVCV) ha reforzado su papel como espacios seguros junto al mar, donde es posible practicar deporte de forma estructurada y segura incluso en episodios de temperaturas extremas.
La iniciativa se alinea con las medidas impulsadas por la Conselleria de Medio Ambiente, que fomenta la creación de entornos adaptados ante el cambio climático. Las escuelas de vela ofrecen un entorno privilegiado: cercanía al mar, circulación de aire constante, acceso al agua, zonas de sombra natural y artificial, fuentes y puntos de hidratación, así como áreas de descanso preparadas para combatir el calor.
“Desde hace años nuestras escuelas están preparadas no solo para enseñar a navegar, sino también para garantizar el confort y la seguridad de los usuarios en cualquier condición meteorológica”, afirman desde la FVCV. “Contamos con protocolos específicos que incluyen el seguimiento de alertas meteorológicas, la adaptación de horarios y el rediseño de actividades en función de las condiciones térmicas”.
Actualmente, la Comunitat Valenciana cuenta con 44 escuelas de vela homologadas, distribuidas a lo largo del litoral, que ofertan diariamente más de 1.100 plazas para la práctica de distintas modalidades de vela. Cada una cumple con los estándares técnicos, organizativos y ahora también climáticos que exige la Federación.
Estas instalaciones, además de su función formativa y deportiva, ofrecen una alternativa saludable y segura al ocio convencional en playa o en espacios cerrados, especialmente para niños y jóvenes. La vela, gracias a su contacto directo con el entorno marino, emerge como una disciplina idónea para mantenerse activo sin exponerse a riesgos innecesarios durante los días más calurosos del verano.
En tiempos de cambio climático, el deporte también se adapta. Y en la Comunitat Valenciana, la vela se reafirma como un refugio climático y educativo, una apuesta por la salud, la sostenibilidad y el deporte seguro frente al calor.
