La Bahía de Cádiz recibe a más de 60 embarcaciones de ocho países y refuerza la proyección de Andalucía como destino náutico

Puerto Sherry y la Bahía de Cádiz albergan del 7 al 12 de abril el Campeonato del Mundo de Flying Dutchman 2025, prueba incluida en la World Race Flying Dutchman 2024/25. El evento está organizado por el Club Náutico Puerto Sherry y cuenta con el respaldo de la Federación Andaluza de Vela, la Real Federación Española de Vela, la Diputación de Cádiz, la Junta de Andalucía y Puerto Sherry.
La regata reúne a 61 embarcaciones procedentes de ocho países: Alemania, España, Holanda, Italia, Hungría, Polonia, Suiza y República Checa. Alemania lidera en número de inscritos con 33 barcos, seguida por España con nueve. La competición se consolida como una de las más relevantes del calendario internacional de vela de alta competición.
Entre los participantes destacan regatistas de referencia como Kay-uwe Lüdtke y Kai Schafers, actuales campeones del mundo; Szalbolcs Majthenyi y Andras Domokos, campeones de Europa en 2024; y Pepe Ruiz y Fran Martínez, representantes españoles con títulos de campeones del mundo máster en 2021 y sextos de Europa. También compiten otros nombres destacados como Enno Kramer y Ard Geelkerken de Países Bajos, y los italianos Nicola y Francesco Vespasiani.
La participación incluye deportistas olímpicos como la alemana Peggy Bart y el alemán Jorn Borowski. La competición contempla seis jornadas de regatas, una de ellas de reserva, en un campo de regatas que ya fue sede del Campeonato de Europa 2024.
Puerto Sherry ha sido seleccionado como sede por su infraestructura náutica, capacidad organizativa y condiciones climáticas favorables, consolidando su papel como referente en la organización de eventos náuticos internacionales. El Campeonato del Mundo de Flying Dutchman no solo tiene carácter deportivo, sino también impacto promocional para El Puerto de Santa María, la provincia de Cádiz y Andalucía.
El Flying Dutchman es una embarcación de doble tripulación diseñada en 1952, que formó parte de la clase olímpica hasta 1992. Con 6,06 metros de eslora, es considerado uno de los monocascos más rápidos y técnicamente exigentes del mundo. A pesar de no formar parte del programa olímpico actual, sigue siendo un referente en el mundo de la vela por su rendimiento y complejidad.
La celebración de este campeonato refuerza el posicionamiento de Andalucía en el circuito internacional de vela de alta competición y contribuye al desarrollo del turismo náutico en la región.