La empresa destaca por la realización de importantes refits y mantenimientos de grandes embarcaciones
Varadero Valencia ha cerrado un año de actividad intensa, consolidando su posición como un referente en el sector de la reparación náutica de grandes embarcaciones. En los meses previos a la temporada estival de 2024, las instalaciones del varadero recibieron un número récord de yates y veleros de gran eslora para realizar diversas tareas de mantenimiento y refit.
Entre los proyectos más destacados se encuentra el refit integral del velero Imagine B, de 33,60 metros de eslora, que incluyó trabajos como la renovación de la jarcia, el pintado del casco y la cubierta, la sustitución de la cubierta de teka y la aplicación de sistemas de protección antifouling y Propspeed. También se realizaron trabajos de carpintería, como el panelado interior y la fabricación de mobiliario personalizado.
El velero Starfall, de 28,06 metros de eslora, también fue sometido a una completa renovación. En tres meses, Varadero Valencia llevó a cabo el lijado y pintado del casco, la renovación de los interiores y trabajos de carpintería, además de mejoras en la iluminación y la electrónica.
Otro de los yates que volvió a confiar en Varadero Valencia para su mantenimiento anual fue el Barbanegra, que recibió una revisión completa de seis meses, incluyendo trabajos de pintura, carpintería y mecánica, así como la aplicación de protección cerámica en el casco y dos capas de antifouling para garantizar su protección bajo el agua.
La motora Única también regresó para su mantenimiento anual, con la reparación de muebles, trabajos de composite y la renovación de la plataforma de baño. Asimismo, el yate Disparate eligió por segundo año consecutivo a Varadero Valencia, con trabajos de lijado, pintado y la protección de los ejes y hélices mediante Propspeed.
El Diam, una motora de 32,68 metros de eslora, también confió en las instalaciones del varadero para el mantenimiento de sus sistemas, donde se aplicaron múltiples capas de antifouling, se revisaron las válvulas y se cambiaron los ánodos.
El proyecto más complejo fue el mantenimiento del yate Doña Francisca, de 52,50 metros de eslora, que incluyó operaciones de desarboladura, lijado de la obra viva, y la revisión de sistemas hidráulicos y mecánicos.
La experiencia y la inversión en tecnología avanzada han sido clave para completar con éxito estos proyectos, lo que ha permitido a Varadero Valencia continuar consolidándose como una opción preferente para el mantenimiento de embarcaciones de lujo en el Mediterráneo.